15 de enero de 2017

La clave es la educación

Mirando al mundo con buenos ojos, podemos darnos cuenta de que en nuestra sociedad ha habido avances muy importantes en las ultimas décadas. El respeto entre las personas y la convivencia son claros ejemplos de ello, pues no hace mucho tiempo ver a una persona blanca compartiendo un banco en un parque o usando el mismo autobús que una persona negra, era imposible.
¿Creen ustedes que esto es una casualidad? Pues bueno, podría serlo si nos olvidáramos de pensar en el porqué de las cosas...
Estudiando los aspectos que más se han desarrollado en los últimos tiempos nos damos cuenta de que la educación se ha impulsado en gran parte del mundo.
Esta ha conseguido preparar a las personas para la vida en sociedad a través de la demostración de que mediante el aprendizaje, el ser humano se hace mejor a sí mismo y a su vez se convierte en algo mejor para el mundo.
Las batallas que parecen interminables contra la contaminación(promulgando el reciclaje);
el racismo (demostrando que todos somos iguales ); o contra el maltrato, son todos los días derrotadas un poco más gracias a que abrimos la mente y dejamos que el conocimiento nos haga darnos cuenta de la realidad de las cosas. Como esos ejemplos, hay millones más: está claro que es difícil pensar en algo beneficioso para la vida que el ser humano no haya adquirido gracias fundamentalmente a dejar de lado la ignorancia.
Y bueno, ¿quiénes son los "culpables" de que las generaciones venideras sepan un poco más sobre la vida? La respuesta es "los profesores y profesoras".
El pensar en los centros de docencia como sitios en los que el alumno solo aprende a comentar textos o a hacer derivadas e integrales es un gran error, y de ahí que yo esté escribiendo esta entrada...
Para ser más conscientes de la importancia de la educación solo tenemos que formularnos la siguiente pregunta: "¿qué ha sido siempre lo primero que los grandes poderes han querido eliminar para someter a una población?" Es bien sabido que una población inculta es mucho más manipulable que una preparada, y aquí entra en juego el determinante papel del profesorado, ya que no solo se encarga de asegurarse de que sabemos lo que pone en las orientaciones; también nos inspiran a convertirnos en mejores personas; nos transmiten enseñanzas que emplearemos en nuestro día a día en el futuro y que nos harán estar mejor preparados; mejor preparados para todo, contra la manipulación, el engaño, las injusticias también...
La cuestión es que no podemos olvidarnos de la importancia de la educación, y debemos tener siempre muy presente que donde se haga pensar al ser humano sobre si lo que está haciendo está bien o está mal, es un lugar que merece la pena frecuentar, y al que todos debemos tener el mismo derecho de acudir para participar y aprender. Al fin y al cabo, lo que queremos es hacer del mundo un lugar mejor, o al menos eso me gusta pensar.

Pablo Mena Galán, colaborador de Aequitas25

5 comentarios:

  1. Muy ciertas las palabras de este artículo. El respeto y la educación pienso que son la base de toda relación interpersonal.

    Si nos remontamos a tiempos atrás, temas como el bullyng escolar, el maltrato sexual, el racismo o aspectos parecidos con tal comportamiento despectivo entre personas, se ignoraban o se intentaban solucionar de formas poco coherentes.
    A raí de todo esto se ha ido tomando conciencia a lo largo del tiempo y se han tomado una serie de medidas indirectas, como la propia educación. La educación es fundamental para el respeto entre personas y ya, afortunadamente, se toman medidas a faltas de respeto.

    Empezando por el colegio, donde te enseñas las mínimas de educación entre las personas y te enseñan a convivir con respeto y armonía entre todos los compañeros. Hasta llegar al instituto, donde ya se han instaurado asignaturas como Educación para la Ciudadanía o, incluso, Educación Ética y Moral. Gracias a todos estos avances y la ayuda de todos los profesores a seguir unas normas de respeto estamos consiguiendo que poco a poco las generaciones que llegan hayan tenido una educación más profundizada y no hablo de contenidos, si no de lo que es la educación en sí.

    Y ya no solo en colegios e institutos, muchos deportes también crean un ambiente de respeto y deportividad que refuerza esos pilares fundamentales de la educación.

    Con todo esto y más esfuerzo estamos consiguiendo crear un mundo mucho más respetuoso y concienciado de la igualdad entre las personas. Si todo sigue así, podremos presumir de un mundo respetuoso y educado donde todo el mundo tiene una educación correcta.

    ABRAHAM GÓMEZ AMANTE 2º BACHILLERATO A

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  3. La mentalidad de las generaciones actuales y las venideras, dependen en gran porcentaje de la educación, tanto familiar como escolar. Cuando se inculcan valores como el respeto, la tolerancia y la igualdad se van disminuyendo poco a poco los casos de acoso o discriminación. Sin embargo mientras en el colegio se enseña a los niños a dialogar, en casa los padres aconsejan a sus hijos con frases como "si te pegan, tu les pegas" o "no seas amigo de.. que es muy diferente a ti".

    Esto último es muy negativo para los más pequeños ya que en la mayoría de los casos los comportamientos machistas, racistas o de violencia son "heredados" de sus padres. Por esta razón es muy importante la educación que reciben los hijos en casa, ya que ellos van a transmitir después estos valores a sus hijos y asi sucesivamente.

    Lo ideal sería que tanto en un entorno como en otro, se enseñase que lo diferente no es malo, sino necesario. Que el color, el peso o la estatura son simplemente secundarios, lo que debería ser entendido no solo por los niños, sino también por los adultos, porque como decía Bob Marley, "Las guerras continuarán existiendo mientras el color de la piel sea más importante que el de los ojos."

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  5. Desde que nacemos, vamos aprendiendo. Todas las experiencias que nos acompañan en las primeras etapas de nuestra vida son cruciales. Las personas que tenemos a nuestro alrededor, los momentos, los lugares.

    Como dice Descartes, somos una tábula rasa, un folio en blanco que se va llenando de tinta imborrable con el texto de la vida, perpetuo y perenne; y es por eso por lo que la educación y los valores que recibimos durante este tiempo son los que marcarán nuestro futuro. Los profesores son vitales en este aspecto, y no me refiero a la persona que enseña una materia, sino a la que además de eso, se preocupa por el interior, por las preocupaciones, inquietudes y defectos de cada alumno y lo ayuda a mejorar.

    Desgraciadamente, hoy día escasea este tipo de docentes y lo entiendo. Es difícil tratar de apoyar y ayudar a un estudiante que no trate con respeto, trate de humillar y tenga valores equivocados y dañinos. Y de hecho, esto no escasea en el presente. Es aquí donde introduzco a las familias, y en especial a los padres. ¿Cómo podemos pretender que un escolar respete y se deje reforzar si en su casa prevalecen los insultos, la violencia y la ignorancia? Es imposible. Está recibiendo dos informaciones contrarias, y como es lógico, seguirá la actitud de sus progenitores, que ven esto como algo normal, positivo y eficaz.

    Sinceramente, veo muy difícil que esto mejore y seguiremos viendo cómo chavales de 15 años se ríen de la caída de una persona mayor, ven correcta la violencia y la delincuencia y sus ídolos son criminales y niñatos. Llamadme arcaico, pero no me importaría vivir en una sociedad en la que el maestro es la máxima autoridad y el adulto es tratado con respeto por ese hecho, porque es adulto, ha vivido más situaciones y experiencias y, en general, lo que quiere es hacer de la juventud algo provechoso y trabajador.

    Luis Romero Barrero, 2° Bachillerato B

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